El rol del corrector/revisor de estilo en el desarrollo de un escrito

La corrección/revisión de estilo es una de las fases claves para garantizar la calidad de un texto. Esta consiste en el desarrollo de una lectura detallada de la producción escrita, desde una mirada crítica, con el fin de comprender, orientar y propiciar mejores resultados en torno a la trama textual, la estructura, el uso del lenguaje, etcétera.

 

Esta actividad es realizada por un profesional que posee conocimientos en torno a la gramática, la sintaxis y la pragmática de una lengua y de las normas de presentación del documento. De esta manera, su función principal consiste en identificar dentro del documento las imprecisiones del vocabulario, centrándose tanto en la forma como en el contenido.

 

Desde el campo académico, el enfoque de la forma se conoce como corrección orto-tipográfica, donde se analizan pleonasmos, aliteraciones, uso de tiempos verbales, posición o uso de comas, puntos y tildes; muletillas; entre otros. En algunos casos, la corrección/revisión de estilo implica también el buen uso de las normas de citación y de referenciación. Por otra parte, el enfoque del contenido es entendido como el análisis en profundidad del documento, y centra su atención en una coherencia parcial y total.

 

Una de las herramientas que implementa el corrector/revisor para esta actividad es el control de cambios de Word, ya que permite brindar un seguimiento a la incorporación y eliminación de elementos textuales o de ideas (En otros formatos se hace uso de la herramienta de comentarios, como sucede en los archivos .PDF). Además, permite brindarle al autor del documento consejos o recomendaciones sobre el uso del lenguaje o la falta de claridad, tanto en cohesión como en coherencia. Es importante reconocer que existen signos de corrección convencionalizados en el mundo editorial, pero en el mundo académico no existe una convención establecida. Lo anterior se debe a que, al brindar consejos, modificaciones o recomendaciones, estas deben ser entendidas y atendidas por el autor, quien al final es el que tiene la decisión de aceptarlas o rechazarlas; por eso se usa un lenguaje más claro.

 

Ahora bien, para cumplir con la idea de garantizar la calidad del texto, el corrector/revisor de estilo debe inspeccionar el documento en varias ocasiones. En la actualidad, existe una tendencia a que el proceso se realice de manera conjunta con el autor, para solucionar las problemáticas con mayor facilidad, sin afectar el estilo del texto. Es importante destacar que, la corrección de estilo no es una obligación, pero se considera un elemento clave dentro del mundo académico, editorial y comercial, ya que permite someter al texto a una mirada externa y procurar con ello evitar malinterpretaciones o errores.

 

Finalmente, la corrección/revisión del estilo solo deriva en el reconocimiento de elementos de escritura del texto que deben ser mejorados, modificados o eliminados;

 

ofreciendo un lenguaje más amplio y acorde con las normas gramaticales. En ningún caso, implica una reescritura del documento, aunque puede darse casos particulares donde sea
más fácil la reescritura parcial o fragmentada del texto que la corrección; esto depende de las habilidades de escritura que posea el autor.